.

Créeme que lo hecho no es nada fácil... y... ah!...
Simplemente me siento engañada una vez más.

Corazón de princesa

"¿Confías en mí?" - es la pregunta que Aladino le hace a Jazmín antes de subir a la alfombra mágica y cantar Un mundo ideal, una de las canciones más hermosas de cualquier cuento de hadas y una que mi corazón anhela desde hace mucho (porque sí, me identifico con la princesa de Disney que lleva mi nombre en ese momento).

Cuántas veces he escuchado esa pregunta... "¿confías en mí?", yo -para bien o para mal- muchas veces terminé diciendo "sí, confío", acto seguido la alfombra mágica a la que me subí se acabó de gasolina y caí 5 metros hasta el suelo donde no sólo me saqué el ancho sino también hice pedazos mi corazón. Sí, he sido herida (y lo peor es que no me ha pasado una sola vez).

¿Cómo entonces un corazón así de vulnerable puede volver a confiar otra vez? Soy sincera, me es muy difícil confiar en las personas... son contados con una mano las personas en quiénes de verdad confío...

Hace aproximadamente un año, llegué a un lugar y conocí el Único Amor en el que creo, se puede confiar completamente. Me ha costado darle mi corazón por completo, y a veces creo que todavía lucho porque no cure mis heridas... porque duele, pero cada vez me voy dando cuenta que Su amor es increíblemente bondadoso, fiel, eterno, PERFECTO. En realidad, el sueño de cualquier princesa.

Mientras corro hacia Él, intento no ver a los lados, menos atrás... y debo decir, que hasta el momento, las veces que lo he hecho me he tropezado, sacado de nuevo un poco la mugre y he puesto, de nuevo, mi corazón en riesgo... pero cuándo lo veo a Él y corro hacia Él, cada vez con más fuerza, me siento segura, vulnerable sin necesidad de sentirme palteada. Los miedos se van de poco a poco mientras yo quiero conocer más Su corazón y ver las cosas desde Sus hermosos y perfectos ojos.

Ahora, eso no quita el hecho que mi corazón lata con fuerza y anhele el día que un valiente guerrero venga a buscarme en la protección de mi Padre, tome mi mano y no sólo comparta conmigo el mundo ideal que siempre quise, sino que también pueda reconocer la luz (posiblemente, mis 2 canciones favoritas de princesas)

Esta princesa ha hecho la promesa que va a cuidar su corazón con su espada en alto, protegida con el escudo de Su padre y que si un guerrero quiere venir a rescatarla, ella le va a abrir la puerta, no sin antes haber probado su valentía, coraje, fortaleza y paciencia. Idóneo, la lucha será larga y no será fácil, pero te pido que no desfallezcas, porque si me demuestras que puedo confiar en ti, habrás ganado la primera batalla del "resto de nuestros días".